Bolivia aumenta el numero de muertos. CRISIS Y PROTESTAS.

Bolivia, aumenta la crisis y el numero de muertos, tres personas murieron cuando los servicios de seguridad bolivianos intentaron despejar el camino para que los tanques de gas salieran de la planta de gas de Senkata, cerca de La Paz, el pasado martes.

Al menos 26 personas han sido asesinadas en disturbios políticos provocados por una controvertida elección presidencial el 20 de octubre. Además de las tres muertes del martes, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos dijo el sábado que 23 personas habían sido asesinadas desde que comenzaron las protestas.
Las manifestaciones estallaron después de que se denunciaran irregularidades electorales durante las elecciones, lo que sumió al país en el caos.

El ex presidente Evo Morales negó cualquier fraude electoral, pero finalmente renunció en medio de la presión y huyó a México, donde se le concedió asilo político.
Un gobierno interino ha tomado el poder y ha prometido celebrar nuevas elecciones “lo antes posible“, pero los partidarios de Morales se han hecho eco de la afirmación del líder durante mucho tiempo de que fue víctima de un golpe de estado, y desde entonces han salido a las calles, donde se han enfrentado a la policía antidisturbios y al ejército.

La Defensoría del Pueblo boliviana dijo que los tres manifestantes fueron asesinados el martes mientras las Fuerzas Armadas y la policía bolivianas trabajaban para “permitir la salida de los tanques de gasolina” de la planta de Senkata.
Los militares emitieron una declaración diciendo que intentaban preservar un “servicio público esencial estratégico” y que habían agotado las opciones de diálogo.

El Ministro de Defensa boliviano, Luis López, dijo en una conferencia de prensa que lamentaba el hecho pero sostuvo que “ni un solo proyectil era del ejército”.
Los observadores internacionales han advertido sobre posibles abusos de los derechos humanos y han pedido al gobierno de Bolivia y a la oposición que resuelvan la crisis política de forma pacífica.
Morales dijo en una entrevista con CNN el viernes que estaba dispuesto a regresar a Bolivia y no presentarse a las próximas elecciones por el bien de la paz y la estabilidad si su renuncia es aceptada.
La presidenta interina Jeanine Añez culpó a Morales por el aumento de la violencia.
“Estoy asombrada por la forma de violencia que Evo Morales ha generado dentro del país simplemente aferrándose al poder.

 

 

Human Rights Watch acusó al gobierno de Añez de otorgar a los militares poderes arrolladores que “parecen dar prioridad a la represión brutal de opositores y críticos y dar a las fuerzas armadas un cheque en blanco para que cometan abusos en lugar de trabajar para restaurar el estado de derecho en el país”.
“La prioridad debe ser asegurar que se respeten los derechos fundamentales de los bolivianos, incluyendo la protesta pacífica y otras reuniones pacíficas”, dijo José Miguel Vivanco, director para América de Human Rights Watch, en una declaración.

Morales fue el primer presidente indígena boliviano electo y dirigió el país durante 14 años. Durante mucho tiempo ha gozado de apoyo, entre otros muchos, por sus políticas izquierdistas de reducción de la pobreza y apoyo a los bolivianos indígenas. Los indígenas constituyen el 20% de la población de Bolivia, mientras que el 68% del país tiene ascendencia amerindia, según el CIA World Factbook.

Muchos de los que han salido a protestar han sido indígenas bolivianos que están enojados porque el nuevo gobierno no es electo y no los representa en términos de religión y raza.
Añez y su gabinete no tienen representación indígena.
“El nuevo gobierno está compuesto por muchas figuras que son cristianos evangélicos autoproclamados”, dijo Bret Gustafson, profesor asociado de antropología de la Universidad de Washington en San Luis, en un comunicado.
“Muchos están argumentando que Morales, que era indígena, había sacado a Dios del gobierno y que quieren traerlo de vuelta. Los grupos de derechos de las mujeres, que no eran necesariamente grandes partidarios de Morales, están preocupados de que el nuevo régimen haga retroceder los avances en materia de derechos de género y sexualidad.

Otros beneficios sociales obtenidos bajo Morales, incluyendo la redistribución del dinero generado por la industria del gas natural, también pueden estar en riesgo”.
Esta historia ha sido actualizada para corregir el número de muertes reportadas en Bolivia.