A pesar del hermetismo que caracteriza al gobierno del Partido Comunista, desde el exterior se especula seriamente acerca una posible crisis económica en China. Se dice, pues, que el gigante asiático está tambaleando frente al desastre inmobiliario de Evergrande y otras coyunuturas.
Crisis económica en China: 3 claves del descenso
Continúa la pandemia
Una de las coyunturas que más agobia actualmente a las grandes ciudades chinas y sus zonas rurales es la del covid-19. Mientras en la mayoría de países ya se ha salido adelante, en China las políticas de distanciamiento continúan siendo estrictas, debido a la baja capacidad de vacunación del país.
Con el fin de no saturar los servicios médicos, que podrían ser insuficientes, en China siguen experimentando medidas típicas del año 2020.
Desastre inmobiliario
El colapso del monstruoso sector inmobiliario de China ha causado un enorme impacto en el gobierno y los ciudadanos. Muchos habitantes chinos perdieron todos sus ahorros, debido al fracaso de los proyectos de construcción de inmuebles en China.
La producción de bienes inmuebles en China sobrepasó, de lejos, la demanda del mercado. Como resultado, la empresa constructora más grande de este inmenso país, Evergrande, dejó de tener recursos para continuar con sus proyectos.
Miles de familias chinas, que habían invertido en las construcciones, perdieron todos sus ahorros. Además, el gobierno ha tenido que intervenir con multimillonarias sumas de dinero. Lo anterior a impactado gravemente la estabilidad del país.
Descuido del sector tecnológico
Los principales gigantes tecnológicos de China, Tencent y AliBaba, se vieron castigados por estrictas regulaciones del gobierno. En consecuencia, miles de inversionistas prefirieron retirar o no continuar inyectando capital. En consecuencia, en China se perciben altos índices de desempleo y el país ha perdido poder económico en el sector de la tecnología frente a su competencia.
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