Unión de dos gigantes bancarios
La noticia de la fusión de los bancos suizos UBS y Credit Suisse ha generado un gran revuelo en el mundo financiero. Para Martin Lück, jefe estratega de la mayor gestora de activos del mundo, Blackrock, la compra de Credit Suisse por parte de UBS se puede graficar “como si se hubiera ido un zombi, pero estuviera surgiendo un monstruo”, en referencia al “nuevo UBS”.
Un banco “demasiado grande para quebrar”
El riesgo se amortigua, de momento, porque el banco débil queda fuera del mercado y recibe el apoyo masivo de un banco más fuerte, que es aproximadamente el doble de grande. Este nuevo UBS está fuertemente asegurado por garantías adicionales, pero “esto también crea un banco enorme, que resulta demasiado grande para quebrar“. El UBS ya opera en todo el mundo, tanto en gestión de patrimonios como en banca de inversión.
Severos recortes
Con la fusión, la dirección actual de UBS se enfrenta a una tarea hercúlea. El consejo de administración está dirigido por el experimentado banquero Colm Kelleher, que trabajó durante 30 años para el banco de inversión estadounidense Morgan Stanley. Por otra parte, desde 2020 la dirección operativa está en manos del holandés Ralph Hamers, anteriormente al frente del gran banco ING. Él es quien ahora tiene que arreglar el desaguisado, porque hasta una quinta parte de los 50.000 empleados de Credit Suisse podrían perder su empleo debido a la desaparición de ese banco.
La supervisión bancaria suiza
Otro afectado con la desaparición de Credit Suisse es la autoridad suiza de supervisión bancaria Finma, que tiene una tarea aún mayor por delante. Ya se ha criticado su falta de supervisión de Credit Suisse, cuyas dificultades se conocían desde hace meses. ¿Debería la autoridad supervisora haber observado y, sobre todo, actuado antes? Esta es sólo una de las preguntas que se escuchan en los mercados durante estos días.
La reacción de la Reserva Federal estadounidense
En las jornadas y las semanas venideras también será interesante ver qué bancos se benefician de la reciente fusión. También queda por ver qué reacción tendrá la Reserva Federal de EE.UU. a corto plazo. Esto es algo que los operadores bursátiles esperan con impaciencia ante las turbulencias vividas desde el miércoles (15.03.2023) en los mercados financieros. ¿Mantendrá este organismo su política restrictiva para luchar contra la inflación? La experta en divisas de Commerzbank, Antje Praefcke, dice: “que yo recuerde, las expectativas antes de una reunión de tipos de interés de la Reserva Federal nunca han divergido tanto, de 0 a 25 ó 50 puntos básicos”.
Con la reciente fusión de los bancos suizos UBS y Credit Suisse, la dirección de UBS se enfrenta a una tarea compleja para garantizar la rentabilidad del nuevo banco. Martin Lück, jefe estratega de Blackrock, afirmó que “harán falta recortes significativos para que este banco sea rentable”. La fusión creó un banco enorme, que es demasiado grande para quebrar y está fuertemente asegurado por garantías adicionales. Los principales bancos centrales acordaron ampliar las posibilidades de que los bancos comerciales tomen préstamos de dólares a corto plazo para evitar una escasez de liquidez en el sistema financiero mundial.
¿Qué dicen los expertos?
El holandés Ralph Hamers, director operativo de UBS desde 2020, es quien tiene la responsabilidad de arreglar el desaguisado, pues hasta una quinta parte de los 50.000 empleados de Credit Suisse podrían perder su empleo debido a la desaparición de ese banco. Hamers trabajó durante casi 30 años para el grupo financiero holandés ING, donde reestructuró el banco y lo transformó en un banco moderno y digitalmente innovador, pero su reputación se vio dañada por un escándalo de blanqueo de dinero.
La autoridad suiza de supervisión bancaria Finma también enfrenta una tarea importante después de la desaparición de Credit Suisse. Ya se ha criticado su falta de supervisión de Credit Suisse, cuyas dificultades se conocían desde hace meses. Los clientes de ambos bancos podrían trasladar sus cuentas a otros bancos más pequeños o a sociedades de gestión de activos en Suiza o en el resto de Europa.
Los mercados financieros esperan con impaciencia la reacción de la Reserva Federal de EE.UU. a corto plazo después de las turbulencias vividas desde el miércoles. Los problemas del sector bancario se originaron en EE.UU. y se espera que la Reserva Federal mantenga su política restrictiva para luchar contra la inflación. Antje Praefcke, experta en divisas de Commerzbank, señala que “las expectativas antes de una reunión de tipos de interés de la Reserva Federal nunca han divergido tanto, de 0 a 25 ó 50 puntos básicos“.
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