¿Podría el coronavirus costarle las elecciones a Donald Trump?
Las elecciones que se celebran en Estados Unidos en noviembre parecían ser algo seguro para Trump. Con un crecimiento económico implacable y una gestión internacional inolvidable.
Inicialmente, Trump parecía depender del voto latino para ganar las alecciones; ahora, necesitará mucho más que eso.
El gigante político de Donald Trump se enfrenta a un desacierto al haber manejado tardíamente la situación del coronavirus con toda la rigurosidad necesaria. Inicialmente, el mandatario fue un negacionista de la seriedad del virus. En sus palabras, afirmó que sería algo que vendría y que pasaría como algo pasajero.
En un comienzo, no le prestó suficiente atención. No hizo que las actividades del país se suspendieran ante la amenaza del virus y descartaba imponer medidas de cuarentena en Nueva York… mientras tanto, el COVID–19 se incubaba entre los estadounidenses, que, como sabemos, no tienen los mejores hábitos de salud y alimenticios.
Ahora tienen la tasa más alta de mortalidad en personas jóvenes por coronavirus. La letal enfermedad está cobrando vidas estadounidenses en sus principales ciudades. El gobierno dictatorial chino nunca reveló las verdaderas cifras de muertes por coronavirus y, por eso, países como Estados Unidos dejaron su guardia abajo.
La dictadura militar china escondió, como raro, datos y cifras sobre el coronavirus que concernían a todo el mundo. La cantidad de muertos fue mucho mayor a la que se encuentran en los reportes oficiales porque las autoridades chinas las han ocultado de adrede.
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Como dictadura militar que son, están acostumbrados a hacerlo. Sin embargo, pusieron en riesgo la salud pública de todo el mundo y hay países que, como EEUU, Italia y España, sufren gravísimas consecuencias.
De todos modos, el mal manejo que dio inicialmente Donald Trump a la crisis de salud podría costarle sus próximas elecciones. La eventualidad podría sembrar descontento entre el pueblo estadounidense hacia su mandatario. Las cifras de desempleo que se proyectan para los próximos meses son realmente preocupantes.
Por eso, la estadía del presidente de los Estados Unidos en su cargo es cosa incierta en estos momentos.
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