Cuando Washington impuso esta semana sanciones económicas amplias y profundas a Venezuela, dijo que estaba poniendo a la nación sudamericana a la par de otros “estados renegados” como Corea del Norte, Irán, Siria y Cuba.

Pero hay algunas diferencias clave entre las sanciones venezolanas y el embargo a Cuba, que ya cumple 57 años. Si bien todavía se desconoce mucho acerca de cómo se aplicarán las sanciones, he aquí algunas recomendaciones:

▪ El embargo cubano prohíbe las transacciones con todos los ciudadanos cubanos, incluyendo el gobierno, individuos y compañías privadas, a menos que hayan sido eximidos específicamente con “licencias” especiales.

Las sanciones venezolanas, en cambio, se dirigen específicamente al gobierno venezolano, a sus agencias y a las más de 100 personas y empresas que han sido señaladas previamente por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos. Aún así, las medidas venezolanas podrían tener un efecto de enfriamiento mucho mayor en las empresas.

“Aunque técnicamente se puede permitir tratactivas con actores puramente privados, y a pesar de las autorizaciones particulares, dado el papel dominante del gobierno venezolano en la economía, como cuestión práctica puede ser difícil participar en un comercio que no implique al gobierno”, dijeron los abogados de Kirkland & Ellis Mario Mancuso y Anthony Rapa.

▪ A diferencia del embargo a Cuba, la orden ejecutiva del lunes está hecha a la medida de la complicada situación política de Venezuela. La medida congela los activos pertenecientes al régimen de Nicolás Maduro, pero no los que están bajo el control del presidente interino Juan Guaidó. Uno de los objetivos clave de las sanciones es aislar a Maduro pero reforzar a Guaidó, a quien Washington y más de 50 naciones reconocen como el único líder legítimo de la nación. En consecuencia, las nuevas sanciones permiten transacciones con la Asamblea Nacional, controlada por la oposición, y con personas designadas por Guaidó, incluyendo los directores de la compañía Citgo, una subsidiaria estadounidense de la compañía petrolera venezolana PDVSA.

▪ Las sanciones a Venezuela también hacen excepciones para la ayuda humanitaria, las remesas y… Twitter. El Tesoro modificó 12 licencias y emitió otras 13 para autorizar transacciones relacionadas con la ayuda humanitaria y los servicios de Internet (incluidas las redes sociales), el correo, las telecomunicaciones y la atención médica de emergencia, incluso si se trata de tratar con el gobierno venezolano. Además, permite a las empresas vender medicamentos y alimentos al Estado y a los particulares enviar remesas no comerciales.

▪ A diferencia del embargo contra Cuba, las sanciones venezolanas no incluyen restricciones de viaje para los ciudadanos estadounidenses que viajan al país sudamericano. Aún así, los ciudadanos estadounidenses están obligados a solicitar visas para visitar Venezuela incluso como turistas. Y como ya no hay consulados venezolanos en Estados Unidos, ese proceso se ha complicado.

▪ Las sanciones del lunes también hacen distinciones dentro del sector petrolero de Venezuela de manera diferente. Varios analistas afirmaron que la medida parece apuntar a la petrolera rusa Rosneft y a la china PetroChina, que han estado recibiendo gran parte de las exportaciones de crudo de Venezuela desde que Estados Unidos bloqueó en gran medida las importaciones en enero. Las nuevas sanciones pueden ser utilizadas para perseguir a empresas chinas, rusas, cubanas y turcas si mantienen los esfuerzos de Estados Unidos en marcha. Citgo, sin embargo, permanecerá libre de sanciones ya que está bajo el control de la administración de Guaidó. Aún así, la subsidiaria estadounidense se encuentra en una situación delicada, cargada de deudas acumuladas por el régimen de Caracas. Además, Chevron y algunas otras compañías internacionales que prestan servicios a la estatal PDVSA pueden seguir operando en el país bajo licencias especiales.