El día de ayer, el multimillonario fundador de Amazon, Jeff Bezos, cumplió su sueño de ir al espacio y lo logró con recursos propios. Los costos del viaje no fueron revelados, excepto por la cifra de 28 millones de dólares que pagó un individuo anónimo para participar del viaje. No obstante, esta persona reprogramó su vuelo para el futuro.
El viaje al espacio de Jeff Bezos duró 11 minutos. El billonario estadounidense fue acompañado por un joven astronauta de 18 años (el más joven de la historia), una mujer de 82 años que soñó toda su vida con visitar el espacio y su hermano, Mark Bezos.
Sería imposible no comparar el viaje de Jeff Bezos con el de Richard Branson, quien también fue al espacio 9 días antes que el fundador de Amazon. No obstante, hay que decir que el de Jeff Bezos fue mucho más impresionante. El cohete de Blue Origin despegó desde tierra y aterrizó impecablemente en su mismo sitio de partida. La cápsula en la que viajaron los astronautas regresó a la tierra de forma espectacular, tenida por tres bellos paracaídas.
Al aterrizar, Jeff Bezos celebró con champaña, lo cual confirma que se trata de una carrera. Esto nos lleva a la pregunta: ¿Qué implicaciones tiene la carrera privada por el espacio? ¿A dónde nos llevará este tipo de turismo y exploración?
Pros y contras de la carrera espacial privada
Como todo, la carrera espacial de los empresarios tiene pros, contras y, seguramente, tendrá también resultados inesperados. No obstante, revisemos primero los beneficios que podría traerle a la humanidad.
La exploración del espacio, como tarea científica, puede mejorar la calidad de vida en la Tierra y, además, puede cumplir una función esencial para nuestra supervivencia. Así lo ha planteado, por ejemplo, Elon Musk, quien busca la colonización de otros planetas. En la medida que se instalen fábricas en Marte, por ejemplo, mejoramos las probabilidades de que perdure la vida humana en el planeta y la galaxia.
Los viajes privados al espacio, que serán ofrecidos por compañías como Blue Origin, tienen la misión de democratizar el acceso al espacio exterior. ¿Pero cómo será esto posible, dados los elevados costos de cada viaje? ¿No es esto algo elitista? Pues bien, hay que recordar que antes de estas iniciativas no era posible pagar por viajar al espacio. Aunque el servicio seguirá siendo costoso por mucho tiempo, al menos ahora es posible de hacer. Esto representa, pues, un gran avance en términos de exploración espacial y, en efecto, le abre las puertas a mucha gente para que realice estos viajes.
En cuanto a efectos negativos o colaterales de la carrera espacial privada, deben tenerse en cuenta los efectos ambientales de estas iniciativas. En este aspecto, la tecnología deberá optimizarse para no generar un daño al medio ambiente. Esto está siendo evaluado por los expertos ambientalistas y, seguramente, será uno de los estándares más importantes para que estos viajes sigan siendo posibles. En caso de que se pase por encima del cuidado medioambiental, el turismo espacial no le estaría haciendo un favor al planeta.
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