La OMS advierte que el virus podría tornarse endémico.
Nada es tan sencillo como parece. Debido a la pandemia, los medios de comunicación han tenido que informar a las personas sobre temas complejos como la inmunología. Si ni siquiera los expertos tienen actualmente un conocimiento completo acerca del coronavirus, mucho menos comprendemos la situación las personas del común.
Aún así, hay conocimientos útiles que están al alcance de la comprensión de cualquiera, así como hay otros más complejos de los que ya disponen los expertos. Entrado ya un año desde que se desató la pandemia, hay muchos datos que nos ayudan a entender, al menos, cómo comportarnos. La efectividad del distanciamiento social, el uso del tapabocas y el constante lavado de manos es totalmente indiscutible. Se sabe con certeza que estos protocolos disminuyen significativamente el riesgo de contagio.
Eso hace parte del conocimiento que cualquier ciudadano, sin importar cuán elevado sea su intelecto, puede y debería entender. Por la parte de los expertos, existen muchas incógnitas, cuyas respuestas se basan en estudios estadísticos. Es decir, en probabilidades. Es una probabilidad, por ejemplo, que en promedio el virus dura 14 días en el organismo de una persona común. Que sea una estadística significa que en algunas personas podría ser menos de 14 días y en algunas otras podría ser más.
Bajo la misma lógica, la OMS ha previsto que el coronavirus se convierta en una enfermedad endémica. “Endémico” quiere decir “que afecta habitualmente a una región o país”, según el diccionario de Oxford Languages. Hay varios motivos para que los expertos piensen así y los principales son encontrados en las páginas de la Historia.
En la historia de la humanidad, se han registrado miles de pandemias. Actualmente, la estadística sugiere que una pandemia ocurre cada 10 o 20 años. Fue un asunto de mera casualidad que el coronavirus fuera letal para el 1% de los contagiados. Un virus peor podría matar, en el peor de los escenarios, a todo el que se contagie. Por lo tanto, a pesar de las cientos de miles de muertes, podríamos afirmar que tuvimos algo de suerte.
Asimismo, es necesario ser realistas y saber que, en el futuro, hay más pandemias por venir. Y, de igual manera, nada nos asegura que la próxima sea más o menos letal que la actual. Por eso, la OMS declaró que debemos prepararnos para pandemias peores. De hecho, fue por eso que Bill Gates predijo en el 2015 que una pandemia así ocurriría… y, lo que es peor, va a volver a ocurrir.
Otra inferencia que hacen los expertos, debido a la naturaleza del virus y a los registros de la Historia, es que el virus se tornará endémico. Esto quiere decir que nunca se irá y que tendremos que aprender a convivir con él. Probablemente esto no implique que debamos usar tapabocas para siempre. La vacuna será de gran ayuda, pero no hará que el virus desaparezca ni impedirá que este mute.
En conclusión, las medidas de bio-seguridad a nivel mundial deben estar preparadas para que este tipo de situaciones no altere la economía ni los aspectos más importantes de la vida, como las relaciones sociales. Sin embargo, es necesario que cambiemos y adecuemos nuestro estilo de vida para facilitar la prevención de escenarios como este o como el que ilustran las películas.
Lea también:
La película ‘Soul’, de Disney+, se lleva todas las miradas.
Neymar prepara una polémica fiesta para Año Nuevo.
La OMS advierte que el virus podría tornarse endémico.