¿Se desinfla la burbuja económica de las Big Tech?

¿Se desinfla la burbuja económica de las Big Tech?

Durante la pandemia, al igual que en todas las crisis, hubo perdedores y ganadores. Dentro de los mayores ganadores, en términos económicos, estuvieron las empresas desarrolladoras de tecnología. Las medidas de cuarentena y distanciamiento social impulsaron la demanda de bienes tecnológicos. Por eso, el valor de las acciones de estas empresas creció, gracias a la pandemia del coronavirus.

No obstante, muchas de las inversiones hechas en el campo de la tecnología fueron totalmente especulativas y dieron origen a una gran burbuja. El mejor ejemplo de esto es la famosa compañía de vehículos eléctricos, Tesla. Las acciones de esta compañía se pusieron de moda, básicamente, y esto infló su valor a precios muy elevados.

No se sabe cuándo, pero se sabe con seguridad que todas las burbujas económicas se revientan. Ahora bien, existen dos formas en las que esto puede suceder. Una burbuja económica se puede desinflar lentamente o se puede estallar de manera repentina. Muy probablemente, la burbuja de las empresas de big-tech se desinfle de manera lenta, pero segura.

Ahora, con la reactivación económica, el petróleo ha recuperado su valor y los mercados tradicionales han vuelto a crecer. El turismo y los eventos se retoman, mientras aumenta la desconfianza de los inversionistas en el sector tecnológico.

Elon Musk ha sufrido pérdidas en su patrimonio, esta semana, de 25.000 millones de dólares. Jeff Bezos, por su parte, ha perdido 20.000 millones. Del mismo modo, el precio de las criptomonedas también ha venido en caída.

Entonces, es de esperar que, ahora que se desinfle esta burbuja, los inversionistas busquen mercados alternativos que se encuentran en emergencia. Esto es, quizás, una buena noticia para Latinoamérica. El grave problema para la economía de esta región es la actual ola de líderes de izquierda que han subido al poder.

No obstante, falta ver qué sucede en las elecciones presidenciales de Colombia y quién será el sucesor de Bolsonaro en Brasil. Esto, seguramente, también será determinante para el grado de inversión que entre al continente, durante los próximos 5 a 10 años. Se viene una bonanza para Latinoamérica, ¿Sabremos aprovecharla?

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