En España se discute mucho una iniciativa sobre la escuela propuesta por Vox, un partido radical de derecha, anti-inmigrante y antifeminista, y que ellos llaman “alfiler de los padres” que es “pin parental”, “protección parental”. La “insignia paterna” o “prohibición parental“, para aquellos que la critican, también es abiertamente apoyada por el presidente del Partido Popular (PP) Pablo Casado, mientras que es fuertemente disputada por el nuevo gobierno español – con los ministerios de Educación e Igualdad en primera línea -, los movimientos feministas y los sindicatos.
El “Pin parental” requiere el uso de un documento (pdf) que daría a los padres la posibilidad de dar su consentimiento explícito a la participación de sus hijos e hijas en las actividades complementarias de las escuelas, si su contenido va “en contra de sus principios morales“. Según Vox, la propuesta serviría para proteger a los niños de una serie de contenidos 
La iniciativa fue incluida en el programa de Vox para las elecciones generales del pasado mes de abril, y ahora se ha materializado en la comunidad autónoma de Murcia donde Vox apoya un gobierno con el Partido Popular (PP) y Ciudadanos, un partido liberal de centro-derecha.
El pasado mes de agosto, el Ministerio de Educación regional envió una indicación a cada escuela, desde el jardín de infancia hasta la escuela secundaria, para solicitar el consentimiento de la familia para las actividades complementarias. Los sindicatos, la oposición y diversos movimientos se han opuesto a ello y han amenazado con apelar, ya que las actividades complementarias, a diferencia de las extraescolares, se realizan durante el horario escolar y son obligatorias.
Ahora Vox (fundamental en los equilibrios del gobierno regional para alcanzar la mayoría) ha solicitado y obtenido la inclusión de la “Pin parental” en la ley de presupuestos para el año 2020, abriendo el camino (como ha confirmado el presidente del parlamento local) a una enmienda de los decretos que hacen obligatorias las actividades complementarias.
Sin embargo, el debate ha salido de la comunidad de Murcia porque Vox está presionando para que se apruebe esta propuesta también en los municipios y regiones donde tiene representación, especialmente en Madrid y Andalucía, y porque el gobierno nacional ha intervenido.
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El líder de Vox, Santiago Abascal, habló de la “insignia parental” apelando a la necesidad de “proteger a los niños de los contenidos sexuales que se dan en las escuelas” y utilizando argumentos que reúnen a los movimientos mundiales antiaborto, antifeministas y anti-LGBTQI (con los que Vox tiene vínculos explícitos), incluyendo los movimientos católicos más conservadores. Según Abascal, la educación para la igualdad entre hombres y mujeres o el respeto a las personas con una orientación sexual diferente sólo sería
“Un pretexto” para transmitir otro tipo de contenidos: “el adoctrinamiento” de los niños a “juegos eróticos” que están “lejos de la educación y cerca de la corrupción de los menores”.
Vox, escriben algunos periódicos españoles, ha elegido la
expresión “pin parental” con un preciso objetivo propagandístico, como suele hacer, deformando o exaltando el significado de algunas palabras para sus propios objetivos: en este caso utilizó un término muy extendido y “positivo” que se refiere a la vigilancia y el bloqueo de ciertos contenidos online para sus hijos, trasladándolo a la educación para enfatizar el hecho de que el objetivo es la protección, no la censura. La idea de Vox nació, según El País, tras la oposición de algunos grupos como el Foro de la Familia a las actividades organizadas en algunas escuelas con el apoyo de las asociaciones LGTBTQI+.
Vox está haciendo una intensa campaña por su iniciativa, difundiendo a través de las redes sociales también falsas noticias e imágenes de clases de educación sexual realizadas en algunas universidades de Brasil o Canadá como si hubieran tenido lugar en escuelas españolas.
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En las últimas semanas, los movimientos feministas españoles (que están entre los más poderosos del mundo) han organizado varias protestas en Murcia a favor de la educación pública, laica y feminista. Pero el nuevo gobierno español encabezado por Pedro Sánchez, líder del Partido Socialista 
La ministra de Educación, Isabel Celáa, pidió oficialmente al parlamento de Murcia que eliminara el “pin parental” y la ministra de Igualdad,IreneMontero, habló de la censura educativa.“Los hijos e hijas de padres homófobos tienen el mismo derecho que todos los demás a ser educados en el respeto, la promoción de los derechos humanos y la capacidad de amar a quien quieran”, dijo. Y de nuevo: “Los hijos e hijas de padres machistas tienen el mismo derecho que los demás a ser educados en la libertad, el feminismo y la igualdad.
El presidente del Partido Popular Español, Pablo Casado, apoyó abiertamente la propuesta de Vox, diciendo que “sus” hijos son “suyos” y no del Estado, y que un gobierno no puede imponer a los padres cómo educarlos. Montero respondió que obviamente no ha leído la Constitución y que ningún padre puede negar el derecho a la educación a sus hijos e hijas, no importa cuán “suyos” sean.
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